Vitamina A
La vitamina A es una vitamina liposoluble que desempeña un papel crucial en el mantenimiento de una buena visión, una piel saludable y un sistema inmunológico fuerte. También es importante para el crecimiento y desarrollo, así como para el funcionamiento adecuado del corazón, los pulmones y otros órganos. La vitamina A se encuentra en una variedad de alimentos, como las vísceras, los productos lácteos, el pescado y las frutas de color naranja y amarillo. Refuerza tu sistema inmunológico, la salud de tu visión y de la piel con nuestros suplementos de vitamina A de alta calidad.
Ingesta Diaria Recomendada de Vitamina A
La ingesta diaria recomendada de vitamina A varía según la edad y el género. En Europa, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) recomienda una ingesta diaria de:
- 600 microgramos (mcg) para los hombres
- 500 microgramos (mcg) para las mujeres
- 800 microgramos (mcg) para las mujeres embarazadas
- 1200 microgramos (mcg) para las mujeres en periodo de lactancia
Es importante tener en cuenta que estas recomendaciones se refieren a la cantidad de equivalentes de retinol (RE), que es la medida utilizada para la vitamina A de origen animal, y no a la cantidad de beta-caroteno, que es la forma de vitamina A presente en los alimentos de origen vegetal.
Ingesta Diaria Óptima de Vitamina A
La ingesta diaria óptima de vitamina A varía de persona a persona, pero una de las fuentes más confiables en nutrición, el Consejo para la Nutrición Responsable, afirma que las mujeres y hombres adultos que consumen vísceras regularmente pueden consumir hasta 1500 µg RE por día sin efectos negativos para la salud. Las personas adultas que no consumen vísceras con regularidad pueden consumir hasta 3000 µg RE por día sin efectos negativos para la salud. Las mujeres embarazadas no deben consumir más de 1000 µg RE al día.
Deficiencia de Vitamina A
La deficiencia de vitamina A es un problema común en países en desarrollo, aunque es rara en países desarrollados como los de Europa. Puede causar varios problemas de salud, como visión deficiente, mayor susceptibilidad a infecciones y retraso en el crecimiento y desarrollo. Los síntomas de la deficiencia incluyen ojos secos e irritados, ceguera nocturna y piel seca y escamosa.