L-Glutamina

La evidencia sugiere que la L-glutamina suplementaria beneficia la salud gastrointestinal, apoya la cicatrización de heridas, mantiene la salud inmunológica y ayuda a restaurar los niveles de glutamina en plasma que se agotan tras periodos de estrés físico, como el ejercicio exhaustivo prolongado. La L-glutamina es el aminoácido más prevalente en el torrente sanguíneo. Se encuentra en alta concentración en el tracto gastrointestinal, que es su mayor usuario. Diversos factores de estrés, como traumas, infecciones, malnutrición, quimioterapia, lesiones y entrenamiento atlético de alto nivel, pueden afectar negativamente la absorción en el intestino delgado, lo que puede llevar a alergias alimentarias. En numerosos estudios con animales, la adición de L-glutamina mejoró la absorción, así como la función inmunológica del intestino.

Los músculos esqueléticos contienen la mayor concentración intracelular de L-glutamina. Pero esa concentración puede verse afectada negativamente por diversos factores, como lesiones, infecciones, estrés crónico, malnutrición y el uso de glucocorticoides. El ejercicio intenso reduce los niveles de glutamina en la sangre, los cuales pueden permanecer bajos si el entrenamiento intenso se repite sin una adecuada recuperación. Las investigaciones indican que la suplementación con L-glutamina puede contrarrestar estas condiciones.